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1/03/2025 En un acto de valentía y fe, la madrugada del sábado 1 de marzo, a la 1:45 A.M., el pequeño Jesús Mateo fue rescatado con vida después de permanecer casi 20 horas atrapado en un pozo tubular en la localidad Orellana – Loreto. Su historia se convirtió en un testimonio de esperanza para todos, pues la comunidad local se unió en oración y acción, logrando lo que muchos pensaban imposible.
La vida es un milagro
El momento del rescate fue emocionante, y los presentes, entre ellos bomberos, miembros de la Marina de Guerra y voluntarios, no podían contener las lágrimas. La operación de rescate, que se realizó bajo condiciones extremas, concluyó con la alegría de ver al niño de solo un año regresar sano y salvo a los brazos de su familia. Este acto de heroísmo y solidaridad mostró que, cuando nos mantenemos unidos, la vida puede superar los obstáculos más grandes.
La importancia de estar unidos por la vida y salud
La historia de Jesús Mateo fue seguida con gran interés y sensibilidad por los periodistas móviles, quienes estuvieron cubriendo el rescate en vivo durante más de 20 horas. Su dedicación permitió que las autoridades locales recibieran la presión necesaria para continuar trabajando sin descanso, y a su vez sensibilizó a la comunidad nacional sobre la importancia de unirse por la vida y la salud de nuestros niños. Este rescate no solo fue una hazaña de valentía, sino también un llamado a la solidaridad y a la acción cuando se trata de salvar vidas.
Tras el rescate, el niño fue trasladado al Centro de Salud I-4 de Orellana para ser evaluado por el personal médico. Se está considerando su traslado a la ciudad de Pucallpa para recibir atención adicional.
Este acto de esperanza y valentía deja claro que los milagros existen cuando la solidaridad y la fe se mantienen firmes.
